
Cuando un grupo de chicos se juntan para jugar un picado, tiene lugar una emocionante ceremonia destinada a establecer quiénes integrarán los dos bandos.
Generalmente dos elegidos se enfrentan en un sorteo o pisada (pan y queso) y luego cada uno de ellos elige alternativamente a sus futuros compañeros. Se supone que los más hábiles son elegidos en los primeros turnos, quedando para el final los troncos.
El chico que está esperando ser elegido vive una situación que puede pasar en otros ámbitos de la vida. Sabrá de un modo brutal y exacto en qué medida lo aceptan o lo rechazan. Yendo al grano digamos que, conocerá su verdadera posición en el grupo. Muchos de nosotros, vamos cayendo en la cuenta de este concepto, sin saberlo.
Pero alguien observó que las decisiones no siempre recaían sobre los más hábiles.
En un principio se creyó que el elector, era poseedor de vaya a saber qué sutilezas de orden técnico, que le hacían preferir compañeros que reunían ciertas cualidades.
Pero un día se comprendió que lo que en verdad se deseaba, era jugar con sus amigos más queridos. Por eso elegía a los que estaban más cerca de su corazón, aunque no fueran tan capaces con la pelota.
Este criterio es muy "sentimental" , pero es también estratégico. Uno juega mejor con sus amigos.
Los amigos, ayudan, comprenden, alientan y lo mas importante: perdonan.
Un equipo de hombres que se respetan y se quieren es INVENCIBLE. Y si no lo es, más vale compartirla derrota con los amigos, que la victoria con los extraños o los indeseables.
(Texto extraído y adaptado de "las crónicas del angel gris" de Dolina).
Generalmente dos elegidos se enfrentan en un sorteo o pisada (pan y queso) y luego cada uno de ellos elige alternativamente a sus futuros compañeros. Se supone que los más hábiles son elegidos en los primeros turnos, quedando para el final los troncos.
El chico que está esperando ser elegido vive una situación que puede pasar en otros ámbitos de la vida. Sabrá de un modo brutal y exacto en qué medida lo aceptan o lo rechazan. Yendo al grano digamos que, conocerá su verdadera posición en el grupo. Muchos de nosotros, vamos cayendo en la cuenta de este concepto, sin saberlo.
Pero alguien observó que las decisiones no siempre recaían sobre los más hábiles.
En un principio se creyó que el elector, era poseedor de vaya a saber qué sutilezas de orden técnico, que le hacían preferir compañeros que reunían ciertas cualidades.
Pero un día se comprendió que lo que en verdad se deseaba, era jugar con sus amigos más queridos. Por eso elegía a los que estaban más cerca de su corazón, aunque no fueran tan capaces con la pelota.
Este criterio es muy "sentimental" , pero es también estratégico. Uno juega mejor con sus amigos.
Los amigos, ayudan, comprenden, alientan y lo mas importante: perdonan.
Un equipo de hombres que se respetan y se quieren es INVENCIBLE. Y si no lo es, más vale compartirla derrota con los amigos, que la victoria con los extraños o los indeseables.
(Texto extraído y adaptado de "las crónicas del angel gris" de Dolina).
Por eso queridos profesores, compartamos las futuras derrotas sin decaer. El primer triunfo que tengamos lo vamos a festejar como los que ganan campeonatos, ya van a ver.
Y por que nó el próximo sábado, en el clásico con los otros coleros del campeonato: Contadores A.
Y por que nó el próximo sábado, en el clásico con los otros coleros del campeonato: Contadores A.
A ver quién se reconoce en estas postales de temporadas pasadas...
Volviendo al partido del próximo sábado, roguemos que se recuperen los lesionados, los que estaban de capa caída la levante y los demás que tengamos una buena tarde, tratemos de que no nos invada la hipotermia pectoral del sábado anterior y salgamos a matar o morir. Y si perdemos, no importa, seguiremos unidos, total, que le hace una mancha mas al tigre.
Un saludo a la barra.
Otro saludo para un profesor veterano que cumple años el 29 de mayo: Juan Carlos Aranda... éste si que es un Profesor con título y todo.
